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No intentare con este piano sin teclas , sin cuerdas, sin aire comer el azúcar que se mojó en el lago,
pero después resucitó de la misma forma y las madres que se ofrecen arreglarte tus dientes
los padres que nunca están con las marcas que siempre elijo
y aveces el cielo no para de llorar un montón de campanas sin el ruido
siempre con flores en el pelo y no siempre encantada por el amor
ingenua de esperanzas es la soledad,que llenó los ataúdes muy sellados por el horror.
Monstruos que se presentan una y otra vez y te digo dame la receta para matarte ó
dame la receta para que nunca te hubiera conocido, ni dicho ni que si.
En el andar de mi desierto lleno de lluvia de la nada
miedos que cortan el alma y tristeza que te mojan el pelo recién soplado por un ángel que me invita a vivir un poco más.
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Una historia triste de amor.
caty.
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